
Recomendación: Kelly Lee Owens
Nuestro nuevo miércoles de recomendaciones nos trae a una artista que lanzó uno de los mejores álbumes del año recién pasado: Kelly Lee Owens.
Kelly se acercó al mundo de las artes desde muy joven. Cuando era niña solía escribir poesía y pasar sus tardes en los campos de Gales, lugar donde nació y creció. En su adolescencia se unió al coro escolar y practicaba el bajo y la batería.
A los 19 años Kelly se mudó a Manchester para seguir una carrera de enfermera en un hospital especializado en cáncer. Ahí, aprovechaba los días libres para ayudar a organizar festivales indies pequeños. Después de un tiempo, en 2009, Kelly abandona su trabajo de enfermera para seguir una carrera musical, impulsada por los mismos pacientes a quienes ayudó mientras era enfermera.
Debido a esto, se muda a Londres y toma una pasantía en XL Recordings, sello independiente icónico de Inglaterra, que ha albergado a artistas de la talla de King Krule y Radiohead.
Al mismo tiempo, la artista trabajaba en una tienda de discos, donde comenzó a acercarse a la escena indie londinense. Lentamente se fue acercando a la música techno, ayudada por la presión social, de cierta manera. Una de las anecdotas que marcaron ese cambio de interés fue una vez en que Björk entró a la tienda donde trabajaba y le preguntó donde estaba la sección de música electrónica, lo que la hizo preguntarse por que una artista como Björk escucharía techno.
Así, comenzaba una incursión por los sonidos más electrónicos, al mismo tiempo que tocaba en la banda indie pop The History of Apple Pie. Por allá por el 2013, el artista Daniel Avery, a quien conoció en aquella misma tienda donde Björk buscaba discos techno, la invita a colaborar en su álbum Drone Logic. Posteriormente, en 2016, Owens lanza el EP «Oleic».
Un año después, su álbum homónimo fue lanzado con grandes revisiones desde la crítica abriendo oficialmente su camino en la escena electrónica, con sonidos del ambient y el dream pop. El segundo track de aquel álbum «Arthur», está inspirada y dedicada a Arthur Russell, ícono de la música disco underground. Alexander McQueen utilizó tal canción para su desfile de otoño del 2016, antes de la publicación del álbum, creando expectativa para lo que podría venir.
Owens también ha colaborado con artistas como St. Vincent, en el remix de «New York», canción del último álbum «Masseduction» de la norteamericana, así como con Björk en un EP dedicado solamente a remixes de «Arisen My Senses», de su álbum «Utopia».
En febrero del año pasado Kelly anunciaba el lanzamiento de su segundo disco «Inner Song», junto con el single de tal álbum, «Melt!». Según la misma Owens, el disco fue escrito y grabado durante los peores tres años de su vida. Considerado para lanzarse en mayo, gracias al maldito covid la fecha debió ser retrasada hacia fines de agosto.
En el disco hay una colaboración con el artista John Cale, el cual tambien es galés, siendo esta la razón por la que Kelly lo integra, en una intención para reconectar con su pasado galés. Además, incluye un cover de «Weird Fishes/Arpeggi», cuarta canción de «In Rainbows», el mejor disco de Radiohead (no, no aceptamos otros comentarios).
Kelly logra construir un palacio mental hermoso y pacífico, basado en el dream pop, siendo capaz de tranportarte desde tu habitación hacia el espacio, perfecto para escuchar en la noches de insomnio. Estos sonidos, mezclados con la voz de Owens logra la simbiosis perfecta, cautivando en iguales cantidades tanto con su voz como con sus sonidos.