Jueves de Cine:

«American Pop»

En 2001, se estrenaba en los cines del mundo «El Señor de los Anillos: la Comunidad del Anillo», una de las mejores adaptaciones del gran libro de Tolkien, como no amar a Orlando Bloom siendo Legolas. Sin embargo, 23 años antes se estrenó una versión animada bajo la técnica del rotoscopio, una obra de culto para los seguidores de la Tierra Media. Quién estuvo detrás del pincel y la dirección de la película fue Ralph Bakshi.

Pero como pueden ver en el título, aquí no vinimos a hablar de «El Señor de los anillos», sino que de «American Pop» ¿Por qué tanta vuelta entonces? Luego de «La comunidad del Anillo», Bakshi quería hacer una película más personal e introspectiva, tomando una temática urbana parecida a sus primeras películas.

En esta película, Bakshi recorre las últimas ocho décadas de la historia de Estados Unidos a través de su música y sus acontecimientos históricos. La primera y la segunda mundial, la depresión que viene luego de estas y mucho más queda retratada de una increíble forma animada.

A través de una línea familiar ruso-judía, la historia de Estados Unidos es contada por 4 protagonistas que recorren desde la llegada de migrantes que escapan del zar, hasta el nihilismo punk que ocurre luego de la guerra. Todo esto bajo un gran guión, redactado por Ronni Kern.

El guión no solo logra recorrer más de 80 años, sino que aborda con lujo y detalles muchos sucesos históricos. Acontecimientos destacados del siglo XX se mezclan con historias mus under  de una manera tan rica y natural que no te das cuenta de que estás aprendiendo. Uno de estos casos es el trágico incendio en la fábrica textil «Triangle Shirtwaist» de Manhattan, ocurrido en 1911 donde murieron 146 personas, en su mayoría mujeres.

La independencia que tuvo Bakshi y su equipo llevaron a que esta película alcanzara un nivel de culto único. Abordando de una manera directa y sin pudor los conflictos de la época que marcan a Estados Unidos como un paraíso e infierno musical al mismo tiempo.

Todo esto es llevado de la mano por un soundtrack de lujo, escogido con pinzas para recrear e identificar cada época histórica sin problemas. El recorrido comienza pareciendo una película muda, pasando por el burlesque, el jazz, el country, entre otros, para terminar con la fuerza y rabia del rock y el punk.

Un buen ejercicio para disfrutar esta película es verla dos veces. En la primera déjate llevar por los colores, las canciones y el increíble trabajo de rotoscopia. En la segunda, adéntrate en el increíble guión de la película.