Cover Art: Corpse Art

¿Es la estética importante a la hora de hablar sobre horror?

Por supuesto que sí, y en la música no es una excepción. Hoy es el turno de nuestro especial rotativo, en esta ocasión hablamos de Cover Art y solo por ser la semana de Halloween tenemos que mencionar la tan llamativa “corpse paint” o “pintura calavérica”.

De primeras se nos pueden venir a la cabeza artistas como Kiss, King Diamond, Ghost y un millón de bandas de Death Metal que usan este tipo de maquillaje para lo que algunos llaman “shock rock”, un subgénero musical que se basa en la teatralidad.

En esta página hemos hablado sobre G.G. Allin y podríamos fácilmente decir que sus shows eran lo más “shock rock” del mundo, pero quienes se especializan en este tipo de contenido se molestan cuando se mezcla al anticristo del punk con el shock rock. Entonces, ¿cómo se diferencian?

Es nuestro tema central de hoy: La estética. La banda Ghost es uno de los mejores ejemplos, ya que no tienen la alienación con la industria como lo tiene el death metal, pero tampoco entra en la categoría popular como, por ejemplo, Kiss.

El arte del “corpse paint” comienza con el creador original de «I put a spell on you», el artista afroamericano Jalacy “Screamin’ Jay” Hawkins, en la década de los sesenta; como siempre, llevan la delantera de todo.

No es hasta una década más tarde que el “corpse paint” se comienza a ver en bandas de death metal y recibe su nombre del mismísimo Per “Dead” Blomberg, vocalista original de la banda más notoria del género: Mayhem. Por otro lado, más cerca de nosotres, la banda brasileña Sarcófago también fue pionera en usar este maquillaje en 1985 cuando su líder era todavía el vocalista original de Sepultura, Wagner Lamounier.

Hasta el día de hoy se pueden apreciar hasta en bandas más populares este tipo de estética, sin ir más lejos y aprovechando que es un favorito de la página, My Chemical Romance tuvo mucho de la teatralidad e incluso el maquillaje de la muerte, sobre todo en la era de «The Black Parade».

La idea de todo esto, del maquillaje de calavera y la teatralidad del shock rock, es crear una respuesta en el receptor, usualmente de disconformidad. Pero quienes tienen más libertad de usar estos conceptos son los creadores del death metal y black metal en países nórdicos, tomando en cuenta que el género en sí comenzó como una manifestación en contra de la imposición de las religiones católicas en esa zona, buscando todo lo que fuera “anti-católico” y explotarlo al punto de crear disconformidad y asco en los colonizadores religiosos que arruinaron todo el mundo con sus ideologías.

¿Es esto considerado como arte? Claro que sí. El arte busca crear un sentimiento en el receptor, no siempre tiene que ser considerado como un sentimiento “bueno” o una apreciación de belleza. Y aún así, la belleza es tan subjetiva que para más de algún espectador ver a una persona buscando ser la herejía misma puede ser también algo bello.