
Interpol en Chile: Un aniversario por partida doble
Reseña por Val Uribe
Pocos son los lugares en que se suele reunir gente de varios rangos etarios a disfrutar del mismo espectáculo. Para llamar la atención de diferentes generaciones tienes que tener algo que todos quieran escuchar. Interpol claramente lo tiene, al estar celebrando los aniversarios de sus discos «Turn On The Bright Lights» (2002) y «Antics» (2004), la banda logró llamar gente de todas las edades una vez más para disfrutar lo que sería casi dos horas de música.
Enfocados en el álbum «Antics», pero sin quitarle protagonismo al disco debut de la banda, Interpol vendió todas las entradas para el show en el teatro Caupolicán. Y no solo eso, la banda también tocó la noche anterior en el renovado teatro municipal de Viña del Mar y al igual que en Santiago, vendieron hasta la última entrada. ¡Repasemos la noche!
Desde la apertura de puertas a las 19:00, poco a poco se fue llenando el recinto. Y a las 20:00 subió al escenario Chini.png. El público, a pesar de que se note que se espera a Interpol, está atento e interactúa con Chini, quien puede notar el entusiasmo que la gente muestra y lo agradece, su show es entretenido y tiene a más de algún asistente bailando.
Los fans de Interpol son fieles y siempre lo han sido. Es algo que se nota con los años y con las constantes visitas de la banda tanto a latinoamérica como específicamente Chile. El show anterior en la quinta región marcó la disposición del setlist, dando un poco de lo que todos esperamos escuchar esta noche. Y con un Caupolicán más que repleto (al punto de dar la sensación de estar sobrevendido) se apagan las luces a las 21:00 y arranca el esperado tour aniversario doble tan esperado.
Esta vez comienzan por «Turn On The Bright Lights», tocaron el disco entero a excepción de «The New» y «Obstacle 2», y por supuesto, los b-sides que se sabe que la banda no va a tocar. La sorpresa en esta sección fue «Leif Erikson», ya que en Viña del Mar fue cambiada por «The New». El órden del setlist también fue distinto reforzando la idea de que «Antics» en completo es lo que atrae gente esta ocasión, pero eso no impidió que el público conectara de forma inmediata, no es difícil para Paul Banks y compañía mantener la energía del teatro.
La propuesta fue la siguiente: comenzaron con «The Specialist» y «Say Hello To The Angels», lo cual dejó la vara en alto desde el comienzo del show. Especialmente con Angels, una favorita del público, siguiendo con “Obstacle 1», «NYC» y «Roland», manteniendo al público absolutamente comprometido con los músicos, siguen «Hands Away» y «Stella was a diver and she was always down», la forma en que los asistentes festejan cada canción hace sonreír a los integrantes de la banda. Paul menciona a Chris Broome, quien es originalmente el técnico de la batería de Sam Fogarino. Debido a la salud de Fogarino, Broome está tocando sus partes en la batería, y la verdad es que queda perfectamente bien, se nota que es alguien que ha trabajado con la banda por años.

«Leif Erikson» es la siguiente canción, que como ya mencionamos reemplaza a «The New» y esta sección termina con «PDA», una de las canciones que el público cantó más fuerte en toda la velada.
Luego de esto, el show va a una pausa y el vocalista principal le hace saber al público que se viene «Antics» de principio a fin. En este punto podemos apreciar el español de Paul Banks, quien fue criado en México y posee la fluidez suficiente para que todas las interacciones sean en español. Y como sabe manejarse en el idioma. Se nota mucho que es genuino al hablar y agradecer el recibimiento en Chile, de esta vez y todas las anteriores.
Las luces vuelven cuando la banda sube al escenario nuevamente a presentar «Antics» de principio a fin con la misma estructura del disco de estudio. Desde «Next Exit», «Evil» y «Narc». Esta seguidilla de canciones prende notoriamente al público, incluso más que la sección anterior. «Take you on a Cruise» baja un poco las revoluciones pero ni de cerca para volverlo aburrido, este público ama las canciones lentas tanto como las rápidas.

«Slow Hands», «Not even Jail», «Public Pervert» y «C’mere» siguen el orden del álbum y entre esta parte algunas personas en cancha entre todo el movimiento pareciera que van a empezar una pelea. No un moshpit, sino una pelea real. El altercado no duró una sola canción y la banda no tuvo que intervenir, ya que los asistentes alrededor pudieron contener el problema y rápidamente se volvió el foco al escenario.
Esta sección terminó con «Length of Love» y «A Time To be So Small». La banda estuvo unos minutos bajo el escenario antes de volver con un encore. Una de las canciones favoritas de «Turn On The Bright Lights» que no tocaron en la primera sección del show: «Untitled».
Esta canción es de las favoritas del público, y una muy buena elección para cerrar la noche, creando esa atmósfera nostálgica que los fans de Interpol aman tanto. En este momento se puede entender perfectamente por qué la banda es tan bien recibida en cada visita, su música es cautivadora y siempre quedamos con ganas de más.
La banda se despide y no se olvidan de desearle una buena noche al público con la promesa de encontrarse una vez más con un “hasta la próxima”.
