
«From the Dining Table» de Harry Styles
El mes de les “enamorades” ha comenzado, y hoy, celebrando el pasado cumpleaños de su autor, nos dejamos cautivar en este domingo de gente triste con una canción que sobresaldría por su tono sombrío y que marcaría el final de un álbum debut que nos daría mucho de qué hablar por allá en el año 2017: «From the Dining Table» de Harry Styles.
Siendo considerada por el mismo Styles como su favorita del álbum y con la cual ha dejado relucir su lado más vulnerable y honesto, el track 10 del denominado HS1, «From the Dining Table», se nos presenta como una balada llena de melancolía.
Acompañada de un suave sonido de guitarra, la canción nos muestra a un Harry que, en su frustración y en su intento por lidiar con la soledad, nos habla de su experiencia a solas en una habitación de hotel. Allí, admitiendo depender del alcohol, afirma desganado: “Nunca me sentí menos genial”.
Así, en un relato en primera persona, el cantante nos hace testigues de sus lamentos al intentar sobrellevar la tristeza y la añoranza que lleva en su corazón roto tras una relación fallida que, sin lugar a dudas, lo ha marcado. Todo esto mientras le comenta a aquella persona cómo ha ido su vida ahora que ya no está en ella, cerrando con:
“Even my phone misses your call, by the way” / “Por cierto, incluso mi teléfono extraña tu llamada”.
Esta frase se repite constantemente a lo largo de la canción, enfatizando el peso emocional que ha tenido todo este proceso sobre él.
A medida que la canción avanza, la impotencia y la frustración van en aumento. Entre ello, Harry aborda la sensación de ser reemplazado por parte de su ahora ex pareja, quien, en su intento de seguir adelante, ha dejado atrás pertenencias que alguna vez fueron suyas, entregándoselas a alguien más. Esto representa un golpe duro para él, quien reconoce la pérdida de significado de sus recuerdos y de aquello que compartían.
Ganando mayor fuerza, pasando desde la ira hasta la aceptación, el puente de la canción se presenta repitiendo la frase:
“Maybe one day you’ll call me, And tell me that you’re sorry too” / “Tal vez algún día me llames y me digas que también lo sientes”.
En medio de un acompañamiento de múltiples voces, la melodía se disuelve y Harry, finalmente, acepta la realidad, mencionando:
“But you, you never do” / “Pero tú, tú nunca lo haces”.
Con ello, reconoce que, a pesar de sus deseos, la reconciliación no es un escenario posible y que aquella persona nunca aceptará sus verdaderos sentimientos, prefiriendo dejar atrás aquello que alguna vez les unió.
Siguiendo adelante, aunque con personas que le recuerdan a esta figura del pasado —quienes incluso lo llevaron a casi mencionar su nombre—, Harry se despide finalmente de nosotres y de aquella persona, repitiendo que el silencio y la calma están sobrevalorados y, por última vez, que hasta el teléfono extraña su llamada.
La más amarga de las despedidas y una representación pura de la soledad y la desilusión, «From the Dining Table» se convierte en una canción que ilustra diferentes etapas del duelo y lo difícil que es dejar ir. Su melancolía la vuelve la compañera perfecta cuando nos encontramos con el corazón roto.
Con un drástico contraste respecto a otras canciones del álbum, este tema cierra con broche de oro el debut de Styles en solitario, mostrándonos su habilidad para escribir y relatar episodios de su vida de una forma delicada y emotiva, algo que repetirá mucho más adelante en nuevos capítulos de su carrera.