
Black Country, New Road y «Forever Howlong»
un nuevo sonido para la banda
Reseña por Juan Matamala
Originalmente formado por siete miembros, Black Country, New Road consiguió rápidamente un grupo de seguidores devoto y de culto, primero con su álbum debut «For the first time» (2021), y posteriormente con «Ants From Up There» (2022). La banda se destacó por su mezcla creativa y novedosa del género del rock experimental, junto a la voz grave de su vocalista, Isaac Wood.
Sin embargo, la inesperada salida del cantante los obligó a encontrar un nuevo sonido, hacer cambios y reorganizaciones para llenar el vacío que el ex integrante había dejado. Es así que la voz grave de Isaac fue reemplazada con los tonos suaves y armoniosos de las mujeres del grupo, lo que le entregó un vuelco completo a la energía que contenían sus canciones.
Tres años más tarde, y luego de un álbum en vivo que funcionó como transición entre estas dos eras de la banda, el ahora sexteto vuelve con su cuarto proyecto: «Forever Howlong». Con su nuevo álbum, lanzado el pasado 4 de abril, Black Country, New Road finalmente logra crear un nuevo sonido cohesivo y atrapante. Manteniendo los elementos de rock, los instrumentos característicos de su sonido como el saxofón, la batería, el piano e introduciendo elementos propios del folk y del barroco, el grupo indie británico consiguió entregar una bellísima entrega. Un disco que se siente hogareño, e incluso, a veces, como una escena de Midsommar.
El álbum comienza con «Besties», una oda a la amistad, pero que contiene también un trasfondo triste, puesto que trata el tema de enamorarse de un amigo y que este amor no sea correspondido. La narradora de la canción se encuentra en un dilema: decirle a su amiga que está enamorada de ella y potencialmente arruinar la amistad, o guardar sus sentimientos para siempre. “I know I want something more” (sé que yo quiero algo más) dice la vocalista en el primer coro. Al mismo tiempo, la canción pareciera tener un claro subtexto queer, que se deja entrever particularmente en el momento en que la vocalista dice “yeah, I came out and where were you?” (sí, yo salí del closet ¿y dónde estabas tú?).
En una entrevista con Stereo Gum, May Kershaw afirmó que esta primera canción fue escrita en respuesta a «The Big Spin», la siguiente del álbum. Sin embargo, los miembros de la banda han sido un poco vagos al momento de explicar de qué se trata la canción, teniendo solo la certeza sobre que sea acerca de apegarse mucho a plantas y árboles, así como los efectos que esto tiene. Se podría concluir que, tal vez, esta habla también de una vida muy doméstica, de una persona que se encierra en su hogar y por ello comienza a apegarse excesivamente a las plantas que le rodean.
«Socks» es una de las que contiene más cambios de estilos dentro del mismo. La banda habla de cómo fue difícil hacer los arreglos musicales para esta canción que es tan poco estructurada, y que fue para el baterista en específico, una muy difícil de tocar. En el puente de la canción, la vocalista canta “all things must pass”, en referencia al tercer álbum de George Harrison «All Things Must Pass», confirmado por el guitarrista de la banda Luke Mark, quien incluso mencionó que la canción casi se llama de la misma manera.
El cuarto tema del álbum nació tras un asado en el verano. Originalmente titulada «24/7» y cantada por Lewis Evans, este finalmente le pediría a Tyler Hyde que la interpretase. Ella, por su parte, cambió un poco la letra; si bien el asado se mantuvo, ya no se trataba simplemente de una junta en el verano, sino de la ansiedad social, de cómo el ser tímido a veces es recibido por otras personas como un egocentrismo, una sensación de superioridad por sobre el resto. Asimismo, la canción llamada ahora «Salem Sisters», hace una interesante conexión, comparando el ser juzgade o ser tópico de chismes en la vida adolescente con sentirse como una bruja, quemada en la hoguera.
«Two Horses» comienza de manera acústica, con solo la vocalista acompañada de suaves instrumentos, todo bajo una vibra un poco country, una mandolina resonando a ratos y unos silbidos que nos recuerdan a las películas antiguas del Lejano Oeste. Esta habla de una aventura en la que la protagonista se embarca junto a sus dos caballos y donde conoce a un hombre que eventualmente la traiciona, asesinando a los animales.
Si bien «Mary» trata un tema complicado y desolador, lo hace de una manera hermosa. La canción nos cuenta la historia acerca de una escuela de niñas, donde la protagonista es víctima de bullying, pero no le cuenta a nadie, manteniéndose en silencio. Cantada por las tres mujeres de la banda en armonías, sus voces se acompañan perfectamente, siendo totalmente la parte central de la canción, y siendo acompañadas meramente un par de instrumentos.
A continuación, «Happy Birthday» nos habla acerca de cómo el privilegio no necesariamente viene acompañado de la felicidad y de que la realidad del mundo puede afectar incluso a los que lo tienen todo. La banda ha hablado de cómo esta canción ha sido inspirada por Fiona Apple, Joanna Newsom e incluso The Band. Llena de armonías y de un espíritu comunal, la canción logra ocultar un poco la temática oscura a través de sus instrumentos y las voces.
Una de las canciones que más le costó a la banda hacer, tomando incluso dos años, fue «For The Cold Country». La banda habla de cómo hicieron los arreglos musicales primero y después la letra, cosa que resultó particularmente complicada y que generó, según la banda, una letra desordenada, algo que no vieron como negativo necesariamente. Un trabajo que habla de la introspección y que va acompañada de un instrumental que pareciera casi sacado de una aventura medieval, subiendo lentamente de intensidad hasta que, finalmente, llega al peak de la canción donde se introducen la guitarra y la batería, transformando la canción de un himno medieval a un himno de rock.
«Nancy Tries To Take The Night» es probablemente la canción más triste del álbum. Tyler Hyde ha hablado de cómo la canción es una recopilación de historias de mujeres que se ha encontrado en la vida, todas tristes y la gran mayoría bastante oscuras. En específico, la letra pareciera hablar de Nancy, una mujer que queda embarazada y que su vida se desmorona completamente por este hecho. Sin embargo, al tiempo después, el hijo de Nancy fallece, lo que la hace deprimirse aún más, hasta que atenta contra su propia vida. La canción nos entrega los hechos de manera bastante explícita, y al mismo tiempo nos da un viaje certero dentro de la mente de la protagonista. Musicalmente, la canción es bastante acústica y desoladora, donde brilla la voz de Tyler Hyde por sobre los instrumentos que la acompañan, aunque contiene un momento instrumental que es casi tan bello como misterioso.
Casi llegando al final, «Forever Howlong» es lenta y armoniosa, dirigida principalmente por la voz de la vocalista y por una flauta, hablándonos de una vida monótona y aburrida.
Finalmente, el álbum cierra con «Goodbye (Don’t Tell Me)», escrita para la banda alrededor del 2023. Siendo la más antigua dentro del álbum, la banda habría decidido esperar un poco para afinar la canción, ya que para ese momento, Georgia Ellery estaba trabajando principalmente con su segundo proyecto musical, Jockstrap.
El tema comienza suave, pero va lentamente introduciendo más y más elementos e instrumentos a lo largo de su duración, para terminar con un momento casi orquestal. Con esto llegamos al cierre, con los últimos segundos del álbum donde no se escucha más que las voces de las vocalistas acompañadas de un piano.
Sometidos a bastante cambio, la banda de indie rock Black Country, New Road tuvo que buscar nuevos horizontes. Y es que si bien sus integrantes se han reinventado con cada álbum que han lanzado, con este podemos ver una nueva y clara dirección para la banda. Los elementos orquestales y del folk parecieran estar ahí para quedarse, o tal vez para el próximo álbum se reinventarán nuevamente. Por ahora, lo único que tenemos claro es que «Forever, Howlong» es un álbum impecable, y que si son fans devotos de la banda, o tal vez están buscando música nueva para escuchar, les recomendamos tomarse 52 minutos de su día para escuchar la nueva entrega de “la segunda mejor banda tributo de Slint”.