«Me» de The 1975
Llega un nuevo Unknown Treasure y en conmemoración del cumpleaños de Matty Healy, vocalista de The 1975, el día de hoy les hablaremos de una canción que ha marcado a su fanaticada, recibiendo miles de interpretaciones por parte de les fans y siendo considerada un tesoro dentro de su repertorio. En este sábado santo, les hablaremos de «Me».
Corría el año 2013 y The 1975 lanzó su segundo EP «Music for Cars», mismo que contó con temas como «Chocolate», y cerrando junto a «Me», una balada que se mueve en diferentes escenarios presentados por un narrador, el cual está cargado de remordimiento y dudas. La historia es acompañada de una música que a lo largo de la canción va tomando mayor protagonismo, con un Healy repitiendo un constante “¿don’t you mind, don’t you mind?”.
Mucho se ha hablado del real significado de la canción, llegando a crearse teorías acerca de que habla sobre la culpa del cantante y su búsqueda para disculparse consigo mismo. Otras teorías apuntan a que la canción es contada a través de dos narradores, quienes serían un padre y su hijo, quienes están en constante choque entre la culpa y la vulnerabilidad.
Al hablar de esta canción, Matty Healy menciona lo rápido que esta fue creada, siendo escrita y grabada en aproximadamente un sólo día, además de hacer alusión a la autocrítica que está constantemente presente en su música.
Diez años han pasado desde su lanzamiento, y si bien «Me» no es reconocida como una de las canciones más populares de la banda, sí es considerada como una pieza muy importante de su historia, siendo una de esas canciones de las cuales es muy difícil no identificarse. Un trabajo que ha cautivado a quienes se detienen a escucharla, volviéndola una experiencia completamente personal y única. Con esta canción, The 1975 demostró su habilidad para escribir e interpretar, así como lo versátil que puede llegar a ser su trabajo, variando desde sonidos como los de «Chocolate» o «Head.Cars.Bending» hasta encontrarnos con canciones delicadas como esta.
Sin duda, «Me» es una canción increíble, la cual se ha ganado su lugar dentro del repertorio de The 1975, siendo imposible de pasar por alto, ya sea por su profundidad como por los sentimientos ambiguos que la rodean.