Reseña por Belén Rojas

Anoche, Måneskin se presentó en el Estadio Bicentenario de La Florida para hacernos vibrar con los mejores éxitos de su más reciente álbum «RUSH!» y repasar las canciones más icónicas de su repertorio musical en la que fue su segunda parada por América del Sur.

A las 21:00 hrs en punto, las luces del estadio se apagaron y Damiano David (vocalista), Victoria De Angelis (bajista), Ethan Torchio (baterista) y Thomas Raggi (guitarrista) subieron al escenario desatando la energía de los asistentes con «Don’t Wanna Sleep» y «Gossip», canciones escogidas para abrir la noche. Las luces amarillas y máquinas de humo fueron los únicos elementos que decoraron la puesta en escena e hicieron resaltar a los músicos, que como siempre deslumbraron con sus outfits inspirados en el estilo glam que los caracteriza, su sensualidad e inmediata conexión con el público.

Posteriormente, volvemos al pasado con la canción que los llevó a ganar el Festival de la Canción de San Remo y el Festival de la Canción de Eurovisión: «Zitti e buoni». Al finalizar, el cantante da pie para interactuar con el público por primera vez: “¿cómo están Santiago de Chile? ¿Están listos?” recibiendo una respuesta positiva de vuelta, cargada de ánimos y expectación por la noche que se viene.

Con algunos preservativos volando por el cielo, siendo lanzados de un extremo a otro, cortesía del fan project de la comunidad Måneskin Chile Oficial, «Honey (Are you coming?)» es la siguiente canción del setlist que tienen preparada, la cual es seguida por «Supermodel», ambas siendo acompañadas con efectos de iluminación algo “apocalípticos” acordes a la energía caótica que se percibía en el recinto. 

Las luces rojas cubren el escenario y el fuego se hace presente en el mismo cuando «Gasoline» comienza a sonar, la que logra marcar una especie de clímax en el concierto y llenar de energía a muchos de los fanáticos que, finalizada este, se movieron a toda marcha hacia otro lugar del recinto donde continuaría el show.

Uno de los momentos más emocionantes se vive en el “escenario b”, ubicado dentro del sector de cancha frontal, al que se trasladan Damiano y Thomas para interpretar, literalmente a la “luz de la luna”, la versión acústica de «Timezone», la que el público se encarga de corear, emocionados y expectantes por lo que especulan que seguirá: el cover de una canción chilena.

Lo cierto es que previo al show no había certeza de cuál sería la canción escogida por la banda, pero todos ovacionaron al escuchar que se trataba de «Tu Falta de Querer» de la cantante y compositora Mon Laferte, de la cual Damiano se declaró fan y manifestó lo feliz que le hacía poder interpretar una de sus canciones, añadiendo el hecho de que como banda les encanta tener la oportunidad de hacer covers de los artistas de los diversos países que han visitado en su tour.

Terminada la interpretación, el escenario principal se enciende con Vic y Ethan, quienes comienzan a tocar esperando que Damiano y Thomas logren trasladarse y unirseles para la siguiente canción: «I Wanna Be Your Slave», la que por supuesto trae de vuelta a todos desde el escenario b al principal, ansioses por escuchar uno de los grandes éxitos de la banda.

“¿Cuántos italianos hay presentes hoy?” Probablemente solo un par, pero muchos de los asistentes alzan sus manos con entusiasmo sabiendo hacia donde va Damiano con esa pregunta. “Tal vez no sepan italiano, pero estoy seguro que hay una expresión que todos conocen”, y el público básicamente la pide: «Mamma Mia».

Y es momento de un nuevo cover. La banda en esta ocasión decidió interpretar «Humble.» de Kendrick Lamar, adaptándola a su más puro estilo, cargada de tintes rockeros.

«In Nome Del Padre» y «Bla Bla Bla» son las canciones que tienen preparadas para continuar con el show, las que ayudan a retomar la energía caótica para recibir el momento más especial para la fanaticada de la banda. «Kool Kids» comienza a sonar y un gran grupo de fans sube al escenario para disfrutar junto a los cuatro integrantes, quienes gustosos les reciben y montan un espectáculo lleno de abrazos y muestras de afecto que denotaron la gran cercanía y cariño que mantienen con su público.

Probablemente uno de los momentos más icónicos de la jornada para algunes sea ver a Thomas Raggi con unos cuernos de diablo en su cabeza interpretando un impresionante solo de guitarra en el escenario, para dar paso a la penúltima canción de la noche: «The Loneliest», la cual logra conmover a muches dado que se percibe el inevitable término del espectáculo.

Finalmente, «I Wanna Be Your Slave» es la canción encargada de cerrar el show, la cual es interpretada por una segunda vez en la noche, pero que es recibida por el público con el mismo entusiasmo que la primera.

Måneskin se despide del público chileno en su segunda visita a nuestro país, dejándonos más que claro el genuino cariño existente de la banda hacia su público y demostrándonos que incluso cuando «RUSH!» no tuvo los mejores comentarios por la crítica especializada, su nivel de interpretación y presencia escénica hacen memorable a cada una de sus canciones al ser presentadas en vivo.