
«Babylon»
Llega un nuevo jueves de cine, y qué mejor que una recomendación que promete sacarte de la monotonía de la vida. En esta ocasión, es el turno de la película más reciente del reconocido director Damien Chazelle, a quien probablemente ya conozcan por películas como «Whiplash» y «La La Land». Nos referimos por supuesto a «Babylon».
Escrita como una carta de amor para el cine y una carta de odio hacia Hollywood, «Babylon», escrita, dirigida y producida por Damien Chazelle, es definitivamente la obra más ambiciosa del director a la fecha, contando con un reparto increíble, protagonizada por Margot Robbie y Diego Calva, incluyendo a actores como Brad Pitt y Toby McGuire.
Esta película es descrita como una comedia dramática épica, que básicamente cuenta la historia del cine en los años 20, enfocándose en la depravación y excesos de la época y en cómo estos fueron los catalizadores tanto de los altos y bajos de las estrellas de aquellos años, enseñándonos además cómo esta industria evolucionó hasta convertirse en lo que conocemos hoy como Hollywood.
Pese a recibir críticas bastantes divididas desde su estreno, es innegable el talento que posee Damien en cuanto a su capacidad de transmitir sentimientos a través de la pantalla y si es cierto que esta película se aleja un poco a sus trabajos previos, esta conserva los elementos sentimentales y la intensidad de obras anteriores, que nos lleva por una montaña rusa de emociones que construye a esta épica cinematográfica, con la que Chazelle pone todas sus cartas sobre la mesa. Y como es costumbre, el elemento que siempre destaca dentro de las películas de este director y el que más ha recibido críticas positivas en esta nueva entrega, es la música.
En una ya icónica colaboración entre Justin Hurwitz y Damien Chazelle, quienes se conocieron en la universidad donde ambos estudiaban música, nos traen su 5º proyecto como dúo. La banda sonora de esta película le tomó a Hurwitz aproximadamente 3 años en completar y ese trabajo se refleja claramente una vez que se escucha cada composición. Hurwitz logra crear un mundo único para Babylon a través de sus composiciones gracias a la combinación del jazz característico de la época y su mezcla con géneros más modernos e intensos que acompañan los sucesos e intensidad del largometraje. En las mismas palabras de Hurwitz: “Hablando de cómo podría sonar la música de la película, pensamos en que tal si usamos la instrumentación de las bandas de jazz de 1920 pero añadimos rock and roll o EDM, queríamos música más agresiva, más en tu cara”.
La canción más reconocible de la banda sonora es probablemente ‹‹Voodoo Mama››, que se usa en la primera fiesta que vemos en la película y en donde se encapsula perfectamente el ambiente de caos y exceso de la obra final. Esta canción ejemplifica perfectamente esta fusión de jazz, caracterizado por las trompetas y saxofones, con los elementos más pesados de Rock and Roll, con las percusiones y los elementos de música de baile modernas que logra en colaboración al músico Leo Pellegrino a quien contactó por su trabajo de jazz en combinación con EDM donde el sonido de su saxofón barítono consigue un tono rápido y agresivo, además de aportar estos chillidos que son característicos dentro de la canción.
Incluso si las películas largas no son para ti, esta película merece el esfuerzo. No solo porque entre la historia, la producción visual y la banda sonora, hacen que pierdas de vista los minutos del reloj, sino que también porque entre algunos de estos elementos al menos uno promete capturar y qué mejor que encontrar el nuevo soundtrack con el que obsesionarte, reencontrar tu amor con el cine o simplemente tener la excusa perfecta para ver a la increíble Margot Robbie por 3 horas seguidas.