Rachel Chinouriri
Advertencia de contenido sensible: En este especial, hay mención de temas sensibles como el suicidio y TCA.
Rachel Chinouriri es la definición de una estrella en ascenso. En los últimos meses, lanzó su primer álbum de larga duración, fue reconocida por Adele y su canción «I’m Not Perfect (But I’m Trying)» apareció en la nueva temporada de «Heartstopper». En este nuevo miércoles de recomendaciones, te contamos sobre esta promesa de la música indie pop.
Nacida en Kingston, Inglaterra, Chinouriri creció en los suburbios de Croydon. Sus padres, inmigrantes zimbabuenses, sólo permitían que sonara música cristiana en su hogar, por lo que se vio obligada a explorar sus gustos por sí sola. Pronto, encontró refugio en las canciones de artistas como Coldplay, Daughter y James Blake. Shingai Shoniwa, vocalista y bajista de la banda Noisettes, se convirtió en su ídola.
En su adolescencia, tocar la guitarra y el piano era su cura para el aburrimiento. Las paredes delgadas de su casa requerían que, para no molestar a su familia, cantara en un volumen bajo, casi un susurro, algo que la ayudaría con su estilo más adelante.
A los 16 años, tras sufrir el racismo de sus compañeros de clase, Rachel decidió cambiarse de colegio. Postuló a la prestigiosa BRIT School, la escuela de artes escénicas y creativas que ha recibido a artistas como Amy Winehouse y Leona Lewis. Quedó seleccionada y optó por estudiar Teatro Musical.
En 2016, lanzó su primer EP en SoundCloud, «Bedroom Tales», el cual grabó con un micrófono de £20 y la computadora de su mamá. Las cinco canciones que lo componen fueron los primeros pasos de la artista en la industria musical.
En 2018, el sencillo «So My Darling» vio la luz. Esta balada romántica es íntima, cálida, y destaca por sus bellos arreglos vocales y su emotiva letra. Incorpora, además, notas de voz de sus amigos expresando su amor a otros. Este tema encapsula perfectamente la promesa de querer a alguien para siempre.
Tras sacar el EP «Mama’s boy» en 2019, Chinouriri dio un giro en su estilo: en 2021, publicó el EP de electro-R&B «Four° in Winter». Esto marcó una diferencia con su estilo usual, inclinado hacia el indie pop, el pop rock y el rock alternativo. El cambio se debió a la frustración que sentía la artista, principalmente por los medios que etiquetaban su música como R&B únicamente por ser una mujer negra.
Sin embargo, como por arte de magia, una versión acústica de «So My Darling» se viralizó repentinamente en TikTok. Ella, según le dijo a Teen Vogue, se lo tomó como una señal: “Mi cerebro tuvo un momento de ‘¡ajá!’ en el que pensé, este es literalmente el universo diciendo: ‘¡no, vuelve a tus valores!’”.
En 2022, utilizó sus redes sociales para expresar su descontento respecto a las concepciones erróneas sobre su estilo: “Mi música no es R&B. Mi música no es soul. Mi música no es R&B alternativo. Mi música no es neo soul. Mi música no es jazz. Que artistas negros hagan [música] indie no es confuso. Ves mi color antes de escuchar mi música”, escribió en su cuenta de Instagram.
Desde entonces, ha sacado música que sí la representa: el EP de 2022 «Better Off Without», por ejemplo, y la canción del mismo año «I’m Not Perfect (But I’m Trying)», que apareció en la tercera temporada de la popular serie «Heartstopper».
Este año, Chinouriri lanzó su primer álbum de larga duración: «What A Devastating Turn of Events». A medida que progresa, el disco cuenta una historia. La primera mitad contiene sonidos de pop rock animados, con letras que hablan sobre las relaciones, las decepciones amorosas y la pertenencia. Entre las canciones, están las populares «All I Ever Asked» y «Never Need Me». En el video musical de esta última, aparece la actriz Florence Pugh, que ha declarado ser fanática de la cantante.
Sin embargo, la octava canción del álbum, «What A Devastating Turn of Events», genera un quiebre: narra la historia de su prima zimbabuense, quien se suicidó tras embarazarse fuera del matrimonio. De acuerdo con la artista, la letra representa un reflejo de la reacción de su familia cuando recibieron la noticia.
Este tema marca el tono oscuro y honesto del resto del disco. En las canciones restantes, Rachel aborda los desórdenes alimenticios, los pensamientos intrusivos y la baja autoestima. El cambio brusco, señala ella, es intencional: tiene como objetivo emular cómo hay eventos que repentinamente pueden cambiar tu vida, devastándote y dando vuelta tu mundo por completo.
Aun así, termina con un rayo de esperanza: la última canción, «Pocket», es cálida y esperanzadora. Respecto al mensaje que busca transmitir, Chinouriri dijo a Teen Vogue: “(…) quiero que la gente sienta que su trauma no tiene que destruirlos«.
En su ascenso a la fama, la artista ha ido construyendo una fanaticada que, incluso, tiene famosos entre sus filas: Lewis Capaldi, Sophie Turner y Adele son algunos de ellos. Esta última habló sobre ella en su concierto en Las Vegas en febrero de este año: la llamó “absolutamente asombrosa”.
Rachel Chinouriri es un nombre para no olvidar. Su irrupción en el mundo de la música indie ha sido excepcional y, tras el lanzamiento de su primer disco, esto parece ser sólo el comienzo de una carrera que no dejará a nadie indiferente.